Para nuestra reflexión, cabe señalar ese "al prójimo como a ti mismo". Por una parte, subraya la igual dignidad del otro, e invita a cultivar la empatía. Por otra, nos recuerda que también hemos de amarnos a nosotros mismos. A veces, nos puede costar aceptarnos con nuestras limitaciones... y es bueno recordar la mirada de Dios sobre nosotros, que es mirada de amor.
Para un judío, la Ley no es una simple cuestión de normas: era la "Constitución" del pueblo, y más aún, la presencia viva de Dios en medio de su pueblo, su fundamento. Este texto, que parece "sabido de memoria" nos invita a preguntarnos por lo fundamental en nuestra vida. ¿A qué dedico mi tiempo, mis energías? Porque el tiempo en que no amamos, en que nos dejamos llevar por otras actitudes (indiferencia, rencores...), lo descubriremos, un día, como tiempo (vida) perdido.
"A la tarde te examinarán en el amor" (San Juan de la Cruz, Dichos de Luz y Amor, 59)
Lecturas de hoy: https://www.dominicos.org/predicacion/evangelio-del-dia/hoy/lecturas/
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